Tiempo de lectura para niños: 6 min
En una de las islas danesas, cubierta de sembrados entre los que se elevan antiguos anfiteatros, y de hayedos con corpulentos árboles, hay una pequeña ciudad de bajas casas techadas de tejas rojas. En el hogar de una de aquellas casas se elaboran cosas maravillosas; hierbas diversas y raras eran hervidas en vasos, mezcladas y destiladas, y trituradas en morteros. Un hombre de avanzada edad cuidaba de todo ello.
– Hay que atender siempre a lo justo – decía -; sí, a lo justo, lo debido; atenerse a la verdad en todas las partes, y no salirse de ella.
En el cuarto de estar, junto al ama de casa, estaban dos de los hijos, pequeños todavía, pero con grandes pensamientos. La madre les había hablado siempre del derecho y la justicia y de la necesidad de no apartarse nunca de la verdad, que era el rostro de Dios en este mundo.
El mayor de los muchachos tenía una expresión resuelta y alegre. Su lectura referida eran libros sobre fenómenos de la Naturaleza, del sol y las estrellas; eran para él los cuentos más bellos. ¡Qué dicha poder salir en viajes de descubrimiento, o inventar el modo de imitar a las aves y lanzarse a volar! Sí, resolver este problema, ahí estaba la cosa. Tenían razón los padres: la verdad es lo que sostiene el mundo.
El hermano menor era más sosegado, siempre absorto en sus libros. Leía la historia de Jacob, que se vestía con una piel de oveja para confundirse con Esaú y quitarle de este modo el derecho de primogenitura; y al leerlo cerraba, airado, el diminuto puño, amenazando al impostor. Cuando se hablaba de tiranos, de la injusticia y la maldad que imperaban en el mundo, asomábanle las lágrimas a los ojos. La idea del derecho, de la verdad que debía vencer y que forzosamente vencería, lo dominaba por entero. Un anochecer, el pequeño estaba ya acostado, pero las cortinas no habían sido aún corridas, y la luz penetraba en la alcoba. Se había llevado el libro con el propósito de terminar la historia de Solón.
Los pensamientos lo transportaron a una distancia inmensa; parecióle como si la cama fuese un barco con las velas desplegadas. ¿Soñaba o qué era aquello? Surcaba las aguas impetuosas, los grandes mares del tiempo, oía la voz de Solón. Inteligible, aunque dicho en lengua extraña, resonaba la divisa danesa: «Con la ley se edifica un país».
El genio de la Humanidad estaba en el humilde cuarto, e, inclinándose sobre el lecho, estampaba un beso en la frente del muchacho: «Hazte fuerte en la fama y fuerte en las luchas de la vida. Con la verdad en el pecho, vuela en busca del país de la verdad».
El hermano mayor no se había acostado aún; asomado a la ventana, contemplaba cómo la niebla se levantaba de los prados. No eran los elfos los que allí bailaban, como le dijera una vieja criada, bien lo sabía él. Eran vapores más cálidos que el aire, y por eso subían. Brilló una estrella fugaz, y en el mismo instante los pensamientos del niño se trasladaron desde los vapores del suelo a las alturas, junto al brillante meteoro. Centelleaban las estrellas en el cielo; habríase dicho que de ellas pendían largos hilos de oro que llegaban hasta la Tierra.
«Levanta el vuelo conmigo», pareció cantar y resonar una voz en el corazón del muchacho. El poderoso genio de las generaciones, más veloz que el ave, que la flecha, que todo lo terreno capaz de volar, lo llevó a los espacios, donde rayos, de estrella a estrella, unían entre sí los cuerpos celestes; nuestra Tierra giraba en el aire tenue, y aparecía una ciudad tras otra. En las esferas se oía: «¿Qué significa cerca y lejos, cuando te eleva el genio poderoso del espíritu? ».
Y el niño seguía en la ventana, mirando al exterior, y su hermanito leía en la cama, y su madre, los llamaba por sus nombres:
– ¡Anders y Hans Christian!
Dinamarca los conoce.
El mundo conoce a los dos hermanos Örsted.

Antecedentes
Interpretaciones
Lengua
„Dos Hermanos“ es un cuento fascinante y metafórico que explora el deseo humano de búsqueda de la verdad y el descubrimiento, tanto a través de los ojos de la ciencia como de la justicia. Está ambientado en una pequeña ciudad en una isla danesa, y sigue la vida de dos hermanos que aunque son diferentes en sus intereses, comparten la enseñanza de sus padres sobre la importancia de la justicia y la verdad.
El hermano mayor, Anders, está fascinado por los misterios de la naturaleza, el sol y las estrellas, viendo en ellos no solo belleza sino el potencial de realizar grandes descubrimientos científicos. Anhela volar, emulando a las aves, y siente que sus padres tienen razón al afirmar que la verdad sostiene el mundo.
Por otro lado, el hermano menor, Hans Christian, es más introspectivo y se siente conmovido por las historias de injusticia y por la figura de personajes como Solón, que lucharon por el derecho y la ley. Imagina un viaje en un barco a través del tiempo, oyendo la voz de Solon que enfatiza la construcción de un país sobre la ley. Recibe un beso de inspiración del genio de la Humanidad, quien lo incita a ser fuerte y buscar el país de la verdad.
El cuento se concluye con una evocativa imagen de los hermanos siendo llamados por su madre, revelando sus nombres completos: Anders y Hans Christian. Esta revelación establece una conexión con la realidad histórica, pues los hermanos descubren ser los Örsted, conocidos por sus contribuciones a la ciencia y la literatura. De esta manera, el cuento no solo homenajea las pasiones de estos personajes, sino que subraya su impacto en Dinamarca y en el mundo.
Este texto refleja la importancia de seguir nuestros sueños y pasiones, y cómo la verdad y la justicia pueden guiarnos hacia grandiosas realizaciones, tanto científicas como personales.
El cuento „Dos Hermanos“ de Hans Christian Andersen explora temas profundos de verdad, justicia y el poder del conocimiento, a través de la historia de dos hermanos que encarnan estos valores en sus formas individuales. Ambientado en una pequeña ciudad danesa, el relato se centra en un hogar donde una hombre de avanzada edad se dedica al estudio y preparación de hierbas, simbolizando quizás el conocimiento adquirido a través de la experiencia y la ciencia.
Los hermanos, Anders y Hans Christian, representan dos perspectivas distintas pero complementarias acerca del conocimiento y la verdad. El hermano mayor, Anders, está lleno de curiosidad por la naturaleza y los avances científicos, vislumbrando el futuro en la posibilidad de volar como las aves. Por otro lado, el hermano menor, Hans Christian, es más sereno y reflexivo, y se ve profundamente afectado por la injusticia y la búsqueda de la verdad moral.
A través de sus sueños y aspiraciones, ambos hermanos simbolizan el progreso humano hacia el entendimiento del mundo que nos rodea y la justicia social. Anders, con su anhelo de volar y entender el cosmos, representa el avance científico y tecnológico, mientras que Hans Christian, con su deseo de ver un mundo justo, personifica el avance moral y ético. Juntos, encarnan la idea de que el verdadero avance de la humanidad es una combinación de conocimiento científico y sabiduría moral.
El relato termina revelando que estos hermanos son, de hecho, una referencia a los hermanos Ørsted, personajes históricos que realmente hicieron contribuciones significativas en el campo de la ciencia. Hans Christian Ørsted fue un famoso físico y químico danés, conocido por descubrir la relación entre electricidad y magnetismo, mientras que Anders Sandøe Ørsted fue un político y abogado destacado, profundamente interesado en la filosofía y la justicia social.
El cuento resalta la importancia de la verdad, la ciencia y la ética en el avance de la humanidad, uniendo estos elementos a través de la narrativa de los hermanos Ørsted como inspiradores modelos a seguir. En última instancia, Andersen ofrece una reflexión sobre cómo diferentes caminos pueden llevar a un objetivo común: el desarrollo y el mejoramiento de la sociedad humana a través de la verdad, el conocimiento y la moralidad.
El cuento „Dos Hermanos“ de Hans Christian Andersen ofrece una rica oportunidad para un análisis lingüístico y temático. A continuación, destacaremos algunos elementos importantes desde un punto de vista lingüístico y literario:
Contexto y Descripción: El cuento comienza con una descripción detallada de la escena: una pequeña ciudad danesa en una isla, hogar de campos y antiguos anfiteatros. Andersen utiliza un lenguaje evocador para establecer un escenario bucólico, casi mágico, que es típico de los cuentos de hadas. Esta contextualización no solo introduce al lector al mundo físico del cuento, sino que también prepara el terreno para los temas de naturaleza, ciencia y verdad.
Personajes y Caracterización: Los dos hermanos, Anders y Hans Christian, se presentan con personalidades contrastantes pero complementarias. El mayor es curioso, amante de la ciencia y del descubrimiento, mientras que el menor es reflexivo y apasionado por la justicia. Andersen utiliza descripciones directas para caracterizar a los hermanos, permitiendo que el lector entienda rápidamente sus motivaciones y su esencia.
Temas de Verdad y Justicia: Un tema central en el cuento es la búsqueda de la verdad y la justicia, representada tanto en las enseñanzas de los padres como en las lecturas y pensamientos de los hermanos. El lenguaje aquí es directo y está cargado de un sentido moral, subrayando la importancia de estos valores. Este enfoque resalta el contexto moralista y educativo del relato.
Imágenes y Metáforas: Andersen emplea numerosas imágenes y metáforas para ilustrar los pensamientos y sueños de los protagonistas. Por ejemplo, la cama del hermano menor se convierte en un barco que surca los mares del tiempo, llevando al lector a un viaje metafórico de exploración intelectual y moral. Asimismo, la estrella fugaz que observa el hermano mayor simboliza la aspiración y el deseo de trascender las limitaciones terrenales.
Referencias Culturales e Históricas: El cuento hace alusiones a figuras históricas y mitológicas como Jacob y Esaú, así como a Solón, sumergiendo al lector en una narrativa que trasciende el tiempo y el espacio. Estas referencias enriquecen el texto y le otorgan un sentido de eternidad y universalidad.
Intertextualidad y Autoreferencia: El cuento, al mencionar a los hermanos Örsted y nombrar a uno de los personajes como Hans Christian, juega con la intertextualidad y la autobiografía. Esto invita al lector a reflexionar sobre la influencia de la ciencia y la literatura en la vida del propio Andersen, así como en la sociedad danesa.
En conclusión, „Dos Hermanos“ de Andersen es un relato breve pero denso, lleno de significado simbólico y cultural. El lenguaje empleado por Andersen no solo crea una atmósfera encantadora, sino que también aborda temas profundos de la verdad, la justicia y la aspiración humana. Estos elementos lingüísticos y literarios se combinan para ofrecer una obra rica en interpretaciones y relevancia atemporal.
Información para el análisis científico
Indicador | Valor |
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Traducciones | DE, EN, DA, ES, NL |
Índice de legibilidad de Björnsson | 43.4 |
Flesch-Reading-Ease Índice | 23.3 |
Flesch–Kincaid Grade-Level | 12 |
Gunning Fog Índice | 19 |
Coleman–Liau Índice | 10.8 |
SMOG Índice | 12 |
Índice de legibilidad automatizado | 9.6 |
Número de Caracteres | 3.330 |
Número de Letras | 2.635 |
Número de Frases | 30 |
Número de Palabras | 583 |
Promedio de Palabras por oración | 19,43 |
Palabras con más de 6 letras | 140 |
Porcentaje de palabras largas | 24% |
Número de Sílabas | 1.129 |
Promedio de Sílabas por Palabra | 1,94 |
Palabras con tres Sílabas | 165 |
Porcentaje de palabras con tres sílabas | 28.3% |