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Es la pura verdad
Grimm Märchen

Es la pura verdad - Cuento de hadas de Hans Christian Andersen

Tiempo de lectura para niños: 7 min

– ¡Es un caso espantoso! -exclamó una gallina del extremo opuesto del pueblo, donde el hecho no había sucedido-. ¡Ha pasado algo espantoso en el gallinero de allá! Lo que es esta noche, no duermo sola. Menos mal que somos tantas -. Y les contó el caso, y a las demás gallinas se les erizaron las plumas, y al gallo se le cayó la cresta.

¡Es la pura verdad! Pero empecemos por el principio, pues la cosa sucedió en un gallinero del otro extremo del pueblo. Se ponía el sol, y las gallinas se subían a su percha; una de ellas, blanca y paticorta, ponía sus huevos con toda regularidad y era una gallina de lo más respetable. Una vez en su percha, se dedicó a asearse con el pico, y en la operación perdió una pluma.

– ¡Ya voló una! -dijo-. Cuanto más me desplumo, más guapa estoy -. Lo dijo en broma, pues de todas las gallinas era la de carácter más alegre; por lo demás, como ya dijimos, era la respetabilidad personificada. Y luego se puso a dormir. El gallinero estaba a oscuras; las gallinas estaban alineadas en su percha, pero la contigua a la nuestra permanecía despierta.

Aquellas palabras las había oído y no las había oído, como a menudo conviene hacer en este mundo, si uno quiere vivir en paz y tranquilidad. Con todo, no pudo contenerse y dijo a la vecina del otro lado:

– ¿No has oído? No quiero citar nombres, pero lo cierto es que hay aquí una gallina que se despluma para parecer más hermosa. Si yo fuese gallo, la despreciaría. Pero he aquí que más arriba de las gallinas vivía la lechuza, con su marido y su prole; todos los miembros de la familia tenían un oído finísimo y oyeron las palabras de la gallina, y, oyéndolas, revolvieron los ojos, y la madre lechuza se puso a abanicarse con las alas.

– ¡No escuchéis esas cosas! Pero habéis oído lo que acaban de decir, ¿verdad?. Yo lo he oído con mis propias orejas; ¡lo que oirán aún, las pobres, antes de que se me caigan! Hay una gallina que hasta tal punto ha perdido toda noción de decencia, que se está arrancando todas las plumas a la vista del gallo.

– Prenez garde aux enfants! -exclamó el padre lechuza-. Estas cosas no son para que las oigan los niños.

– Pero voy a contárselo a la lechuza de enfrente. Es la más respetable de estos alrededores -. Y se echó a volar.

– ¡Jujú, ujú! -y las dos se estuvieron así comadreando sobre el palomar del vecino, y luego contaron la historia a las palomas: – ¿Habéis oído, habéis oído? ¡Ujú! Hay una gallina que por amor del gallo se ha arrancado todas las plumas. ¡Y se morirá helada, si no lo ha hecho ya! ¡Ujú!

– ¿Dónde, dónde? -arrullaron las palomas.

– En el corral de enfrente. Es como si lo hubiese visto con mis ojos. Es un caso tan indecoroso, que una casi no se atreve a contarlo, pero es la pura verdad.

– ¡La purra, la purra verrdad! -corearon las palomas, y, dirigiéndose al gallinero de abajo: – Hay una gallina -dijeron-, y hay quien afirma que son dos, que se han arrancado todas las plumas para distinguirse de las demás y llamar la atención del gallo. Es el colmo… y peligroso, además, pues se puede pescar un resfriado y morirse de una calentura… Y parece que ya han muerto, ¡las dos!

– ¡Despertad, despertad! -gritó el gallo subiéndose a la valla con los ojos soñolientos, pero vociferando a todo pulmón: – ¡Tres gallinas han muerto víctimas de su desgraciado amor por un gallo!. Se arrancaron todas las plumas. Es una historia horrible, y no quiero guardármela en el buche. ¡Pasadla, que corra!

– ¡Que corra! -silbaron los murciélagos, y las gallinas cacarearon, y los gallos cantaron: – ¡Que corra, que corra! -. Y de este modo la historia fue pasando de gallinero en gallinero, hasta llegar, finalmente, a aquel del cual había salido.

– Son cinco gallinas -decían- que se han arrancado todas las plumas para que el gallo viera cómo habían adelgazado por su amor, y luego se picotearon mutuamente hasta matarse, con gran bochorno y vergüenza de su familia y gran perjuicio para el dueño. Como es natural, la gallina a la que se la había soltado la plumita no se reconoció como la protagonista del suceso, y siendo, como era, una gallina respetable, dijo:

– Este tipo de gallinas merecen el desprecio general. ¡Desgraciadamente, abundan mucho! Éstas cosas no deben ocultarse, y haré cuanto pueda para que el hecho se publique en el periódico; que lo sepa todo el país. Se lo tienen bien merecido las gallinas, y también su familia. Y la cosa apareció en el periódico, en letras de molde, y es la pura verdad: «Una plumilla puede muy bien convertirse en cinco gallinas».

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Antecedentes

Interpretaciones

Lengua

El cuento „Es la pura verdad“ de Hans Christian Andersen es una sátira sobre cómo se distorsiona la información a través del chisme y la exageración. Comienza con una simple observación de una gallina que pierde una pluma mientras se acicala y termina siendo convertida en una historia escandalosa y completamente desfigurada sobre cinco gallinas supuestamente desnudándose por amor y muriendo como resultado.

El relato muestra cómo la información se tergiversa y amplifica a medida que pasa de un individuo a otro. Cada animal en la historia escucha fragmentos de la verdad y agrega su interpretación o exageración, haciendo que el relato se transforme completamente. La historia original de una pluma perdida se convierte en un rumor sobre múltiples gallinas que han muerto por desamor.

Andersen utiliza esta historia para criticar la naturaleza humana y la tendencia al sensacionalismo, mostrando cómo una anécdota pequeña e inofensiva puede convertirse en un gran escándalo debido a la falta de precisión y la propensión al cotilleo. La frase final, „una plumilla puede muy bien convertirse en cinco gallinas,“ resume este fenómeno, mostrando cómo los rumores pueden escalar hasta convertirse en algo completamente ridículo e infundado.

„Es la pura verdad“ de Hans Christian Andersen es un cuento que aborda de manera satírica y crítica la tendencia humana a distorsionar la verdad a través del chisme y la exageración. La narración ilustra cómo un pequeño y trivial incidente puede transformarse en una historia monumental a través de la repetición y la alteración continua.

En el cuento, el acto inocente de una gallina que pierde una pluma se va deformando a medida que los animales del corral lo reinterpretan y transmiten. Lo que comienza como un comentario sin importancia se convierte, a través de la „cadena de rumores“, en un incidente mucho más escandaloso que involucra a múltiples gallinas que se arrancan las plumas y mueren trágicamente por amor. La historia culmina en el extremo opuesto al hecho original, mostrando cómo los rumores pueden escalar fuera de control.

El uso de los animales en el cuento enfatiza la universalidad del mensaje. A través de las diferentes aves y sus reacciones, Andersen refleja como el fenómeno del chisme y la exageración no es exclusivo de los humanos, sino que puede encontrarse en cualquier comunidad, grande o pequeña.

En esencia, el relato es una crítica sobre cómo las palabras pueden ser transformadas y amplificadas, causando daño y confusión innecesarios. Es un llamado a la reflexión sobre la responsabilidad que conlleva comunicar información y la importancia de verificar la veracidad antes de compartirla. Este cuento delicadamente subraya que la desinformación puede tener repercusiones significativas, transformando „una plumilla“ en „cinco gallinas“, y pone en tela de juicio la credibilidad y las intenciones detrás de las noticias que se difunden.

El cuento „Es la pura verdad“ de Hans Christian Andersen es una sátira sobre la manera en que los rumores y las habladurías pueden distorsionar los hechos. A través de un relato que comienza con una gallina que pierde una pluma y termina en un escándalo de proporciones absurdas, Andersen ilustra cómo las historias pueden crecer y cambiar al pasar de boca en boca.

Uso del lenguaje coloquial y popular: Andersen utiliza un lenguaje simple y directo, accesible para el público en general. Las expresiones coloquiales presentes en el relato (por ejemplo, „es la pura verdad“) reflejan el modo en que las personas hablan en situaciones cotidianas, contribuyendo a la autenticidad del cuento.

Repetición y exageración: La repetición es una técnica fundamental en este cuento y ayuda a enfatizar el crecimiento del rumor. Cada vez que la historia es contada, se añade un nuevo elemento que exagera el relato original. Esto refleja la facilidad con que se distorsiona la realidad en las conversaciones.

Personificación de los animales: Las aves en el cuento (gallinas, lechuzas, palomas) están personificadas, dotadas no solo de la capacidad de hablar, sino también de emociones y preocupaciones humanas. Esto no solo hace el relato más ameno, sino que también permite a Andersen criticar el comportamiento humano de manera indirecta y humorística.

Ironía y crítica social: Andersen utiliza la ironía para subrayar el absurdo de la situación al final del cuento, donde una pequeña pluma se transforma en un rumor escandaloso que culmina en la noticia de la muerte de varias gallinas. Esta ironía no solo es humorística, sino también crítica respecto a la tendencia humana de creer y difundir rumores sin verificar los hechos.

Estructura cíclica: La historia empieza y termina en el mismo gallinero, lo que resalta cómo los rumores pueden volver al punto de origen completamente transformados y ajenos a la verdad inicial. La estructura cíclica refuerza el mensaje de que los rumores pueden volver a quien los inició, ya distorsionados.

Caricatura de la comunicación y los medios: Andersen anticipa una crítica a los medios de comunicación, donde el sensacionalismo y la falta de verificación de los hechos pueden llevar a la publicación de historias falsas. El deseo de la gallina protagonista de publicar el evento en un periódico satiriza esta tendencia.

En resumen, a través de la fábula de una gallina que pierde una pluma, Andersen ofrece una reflexión sobre la naturaleza humana, la credulidad y la propagación de rumores, elementos que siguen siendo relevantes en la actualidad. La maestría de Andersen radica en combinar humor con crítica social en un relato breve pero potente.


Información para el análisis científico

Indicador
Valor
TraduccionesDE, EN, DA, ES, IT, NL
Índice de legibilidad de Björnsson31.1
Flesch-Reading-Ease Índice37.2
Flesch–Kincaid Grade-Level10.9
Gunning Fog Índice13.7
Coleman–Liau Índice9.7
SMOG Índice12
Índice de legibilidad automatizado4.6
Número de Caracteres4.502
Número de Letras3.431
Número de Frases70
Número de Palabras793
Promedio de Palabras por oración11,33
Palabras con más de 6 letras157
Porcentaje de palabras largas19.8%
Número de Sílabas1.482
Promedio de Sílabas por Palabra1,87
Palabras con tres Sílabas182
Porcentaje de palabras con tres sílabas23%
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